martes, 7 de diciembre de 2010

EN LA CALLE DE MI ALMA

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Quien diría que algún día sin querer , atravesarías aquella misma calle, justo en el momento en que yo menos lo esperaba, fue ese exacto momento, tal vez un segundo , no lo sé, pero te vi.
Tan serena, ensimismada en la rutina de un día mas, sin percibirme, sin saber que habías tocado mi alma.
Hasta que giraste lentamente y tu bello mirar se posó en mi.
Intenté pensar que , solo eras ese sueño que tantas veces soñaba despierto.
Pero no, tus bellos labios, tu perfume a rosas, tu suave mirar, la sonrisa casi tímida que dejaba ver tu belleza, quebraron todo cuanto yo sabia del sentir.
No pude dejar de verte, sentí en la profundidad de mi todo, eso tan maravilloso, eso que no sabes explicar con palabras, que tan solo puedes expresar con el corazón.
Trate de decirte algo , pero estaba paralizado , mis esfuerzos solo dieron como fruto mi forestación al verte alejar.
Sin poder impedirlo, sin poder reaccionar, debo decirte que soy bastante torpe en esas cosas.
Así que tuve que contentarme con saber que te conocí, que yo te vi , que me miraste, comprendí que no era un sueño mas, que eras tan real, tan maravillosa. Entonces solo me dediqué a esperarte, esperar el día en que de nuevo te cruzáras en mi camino,  esa vez no perdería la oportunidad, de hablarte, de decirte al menos hola...
Los días pasaron, había comprado una rosa, porque pensé que, de esa manera tendría una excusa para regalártela, pensé que si te veía te diría que, la aceptaras tan solo porque al verte entendí que eras como esa rosa en el jardín de mi alma.

Entonces te esperé, por momentos pensaba que debería estar loco para esperar a alguien que solo había visto una vez en toda mi vida, pero para mi fue mas que suficiente para ser inolvidable.
Te esperaba creando conversaciones imaginarias en mi mente, mas de una vez ensaye en el espejo el modo en que debería decirte las cosas, el modo en que te diría hola, y a decir verdad, soy un desastre... creo que hasta el espejo se reía .
Te esperé, hasta planché mi camisa, bueno , debo admitir que no se planchar,  pero cuando uno siente cosas en el corazón , cree que nada es imposible. El amor es una fuerza tan poderosa, tan maravillosa, que hasta cambia a las personas, por lo menos eso hizo conmigo.
Aquel día pasó, no te vi, volví a casa con mi rosa, con mis horas de ensayo frente al espejo, con mi camisa planchada. Pensé , tal vez solo fue un sueño, tal vez nunca la vuelva a ver de nuevo, admito que sentí tristeza.
Me tire en la cama, y mientras miraba ese bello cielo estrellado,me dormí....
Los días fueron pasando, siempre me tomaba unos minutos al día para quedarme en aquel lugar.
Pasaron los días, las semanas,  los meses.
No volví a saber de ti.
Y me reprochaba el haberte al menos hablado aquel día.
Poco a poco mis días fueron volviendo a la rutina.
Hasta que se me ocurrió algo, algo que yo jamas había hecho , mis amigos me decían que soy de tener ideas tontas, pero yo pensé que tu deberías saber lo que yo sentía.
Así que fui a casa, tomé unas hojas y te escribí , ya que yo nunca había podido decirte lo que sentí cuando te vi, al menos algún día tal vez mis palabras llegarían a ti.
Entonces, no había reparado en un pequeño problema, había quedado tan entusiasmado con la idea de conocerte que olvidé que yo no se escribir palabras bonitas, pedí a un amigo que me ayudara, pero se negó porque consideró mi idea una total y ridícula locura.
Entonces llegué a casa, nuevamente, pero esta vez sin saber como te diría lo que siento.
Leí algunos libros de esos románticos, para quizás aprender , a ser como ellos, pasé horas y horas leyendo.
Si te escribiera quería simplemente asegurarme que mis palabras llegaran a tu corazón, tal cual yo las sentía.
Leí y releí poemas, libros, para al final darme cuenta de que cuando amas no se trata de decir palabras bonitas, sino simplemente decir lo que sientes,dejar que sea tu corazón quien te guíe.
Reconozco que sentía pavor.
Pero tome coraje de donde no había y te escribí....

"Para esa bella mujer que me quitó el sueño, que me regaló un bello atardecer, que hizo que me diera cuenta de que, el amor puede estar tan cerca y a la vez tan lejos.
Desde que te vi , no déjo de pensarte, he pasado noches intentando entender todo esto que siento, y de veras lo único que puedo decir es que , te tornaste inolvidable, que mi corazón siente tantas cosas cuando te pienso, y ojalá esto llegue a ti algún día.
Quiero decirte que, soy un hombre tan común como cualquiera, y que lo único que me diferencia del resto es, que la intensidad de tu dulce mirada dejó en mi una marca indeleble, que no se a borrado con el tiempo, que perdura.
Te confieso que siempre te espéro en aquella calle, en ese mismo lugar donde encontrarás esta nota, y si es que así debe ser, quiero que entiendas que haría todo para volverte a ver.
Probablemente pienses que estoy loco al escribirte esto, pero quien alguna vez amó, sabe que existe una linea delgada entre la locura y la razón cuando se ama.
No se si el destino algún día hará que yo vuelva a verte, pero ten por seguro que estoy tratando por todos los medios de que que así sea.
Si algún día ves a un hombre con una rosa en la mano, y con la camisa a medio planchar, soy yo."

No se si algún día leerás esto, aunque se que cuando eso suceda seré tan feliz, hoy estoy aquí de nuevo en la misma calle donde te conocí, en la calle de mi alma....