domingo, 21 de diciembre de 2014

AMA Y HAZ LO QUE QUIERAS

Desarrollando una idea que ya mencionaba san Agustín, el poeta filósofo Joan Marargall(186-1911) destilaba la esencia de la vida con estas palabras: “Amar, esto es la vida. Amar hasta el punto de poder darse por lo amado. Poder olvidarse a sí mismo, esto es ser uno mismo; poder morir por algo, esto es vivir... Ama, y haz lo que quieras. Amar es pues la causa, la seña y la justificación de la vida... Ama tu oficio, tu vocación, tu estrella, aquello para que sirves, aquello en que realmente eres uno entre los hombres. Esfuérzate en tu quehacer como sí de cada detalle que piensas, de cada palabra que dices, de cada pieza que compones, de cada golpe de tu martillo, dependiera la salvación de la humanidad. Porque depende, créeme”.

viernes, 12 de diciembre de 2014

SOLOS EN COMPAÑIA

Hablar con los demás a distancia, tecleando en una pantalla que nos cabe en el bolsillo, es algo cada vez más común. Y queriendo huir del aislamiento, acabamos estando solos a pesar de tener a otras personas a nuestro lado. Ponernos algunos límites nos permitirá volver a disfrutar de las conversaciones que nos nutren y ayudan a crecer.
Vivimos tres fantasías gratificantes fruto de nuestros dispositivos móviles: que podemos controlar nuestra atención y depositarla donde más nos interesa, que siempre habrá alguien escuchándonos y que nunca estaremos solos. Tres creencias profundamente dañinas: nada tiene de malo estar y sentirse solo en algún momento; no siempre tiene por qué haber alguien escuchándonos; y no podemos controlar constantemente hacia dónde dirigimos nuestra atención.
Deberemos encontrar el punto de equilibrio.
Rosa Rabbani (Dra. Psicología)

miércoles, 3 de diciembre de 2014

PASIÓN

El mejor dibujo de una rosa no huele a rosa. Todo lo que pueda decirse del amor es nada si nunca lo has sentido. Es la emoción y el compromiso con la vida lo que le concede sustancia a lo vivido. La pasión es la energía de la acción, el combustible de tus músculos. El fuego sagrado de tu conducta.
Sin la pasión, seguirás siendo un espectador impávido de tu existencia, aunque ayer, hoy y mañana estés en el centro del escenario. Y aunque todos te aplaudan o te abucheen, tú no estarás allí si en tu papel de cada momento no está involucrado el corazón.
Jorge Bucay